
¿Por qué una alimentación saludable va de la mano con unas finanzas sanas?
A largo plazo, una alimentación saludable puede tener un impacto positivo en nuestras finanzas.
Acá le brindo algunas razones por las que una alimentación sana está relacionada con unas finanzas sanas.
Menos gastos en atención médica: Más ahorro
Una alimentación saludable puede ayudar a prevenir enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes y las enfermedades del corazón, lo que significa que es menos probable que necesitemos atención médica costosa en el futuro.
Piense que muchas opciones de comida rápida son altas en calorías, grasas saturadas y sodio, lo que puede aumentar el riesgo de obesidad, enfermedades cardíacas y otros problemas de salud.
Las carnes procesadas como salchichas, tocino y jamón pueden ser caras y, al mismo tiempo, son ricas en grasas saturadas y sodio, lo que aumenta el riesgo de enfermedades del corazón.
Los productos de panadería que casi todos nos gustan, como los pasteles, galletas y muffins pueden ser caros y, al mismo tiempo, contienen grandes cantidades de azúcar refinada, grasas saturadas y calorías, lo que puede contribuir a la obesidad y todo lo que esto acarrea.
Otros alimentos como los embutidos importados pueden ser costosos y también pueden contener altas cantidades de grasas saturadas y sodio.
Dieta sana: Más ahorro y salud
Por el contrario, una dieta saludable también puede tener un impacto positivo en el estado de ánimo. Se ha demostrado, que una dieta rica en frutas, verduras, pescado y otros alimentos saludables puede mejorar el estado de ánimo y reducir los síntomas de la depresión y la ansiedad, así como disminuir las enfermedades anteriormente mencionadas.

Como se indicó en el post: ¡Cuide su salud y cuidará sus finanzas!, de acuerdo con el portal de CNN en español en el artículo: Los problemas comunes en Latinoamérica de los sistemas de salud: https://cnnespanol.cnn.com/2018/12/18/los-problemas-comunes-en-latinoamerica-de-los-sistemas-de-salud/
“Los latinoamericanos no cuentan con un sistema sanitario que les garantice medicamentos, atención en el momento requerido y los insumos necesarios para intervenciones quirúrgicas para recuperar su salud…”
Lo anterior motiva muchas veces a recurrir a la medicina privada, no solo para lograr el tratamiento oportuno de la enfermedad, si no la adquisición de una mejor opción de medicamentos, para el alivio de los padecimientos.
Evidentemente la búsqueda de resultados fuera de los sistemas públicos de salud dadas sus falencias, provocan gastos médicos elevados, durante períodos de tiempo prolongados o a veces de por vida, lo que obliga a que esos gastos se vuelvan recurrentes y sea necesario considerarlos dentro de nuestro presupuesto, junto con todos los demás gastos que se deben atender.
Entonces una alimentación sana le brindará una posibilidad más baja, de padecer de una serie de males asociados a una mala alimentación, con el consiguiente ahorro en gastos médicos, pero también le proveerá de otros beneficios tales como los que le expongo a continuación.
Mayor productividad
Una dieta saludable puede mejorar nuestra energía, productividad en el trabajo, y nuestra capacidad cognitiva pues proporciona al cuerpo los nutrientes esenciales que necesita para funcionar de manera óptima y hace que el cuerpo se sienta alerta y concentrado.
Las personas que siguen una dieta saludable también tienen menos probabilidades de enfermarse y faltar al trabajo.
Una dieta saludable puede fortalecer el sistema inmunológico y prevenir enfermedades, lo que significa que los trabajadores son menos propensos a enfermarse y necesitar tiempo de convalecencia, lo que es particularmente beneficioso para quienes trabajan de forma independiente, pues sus ingresos generalmente dependen de su capacidad de seguir produciendo día a día y no pueden acogerse a algunos de los beneficios que brinda el trabajo asalariado.
En consecuencia con lo anterior, usted tendrá un menor estrés financiero, evitando el impacto negativo en la salud física y mental. Si tiene una buena salud física y está en forma, es menos probable que experimente estrés financiero debido a la incapacidad de trabajar, o a gastos médicos imprevistos.

Ahorro en comida rápida, comida para llevar y bebidas azucaradas
Si comemos alimentos saludables y preparamos nuestras propias comidas en casa, es menos probable que compremos comida rápida o para llevar, lo que podría resultar en un ahorro significativo y una ganancia en salud.
La compra de alimentos saludables a granel puede ser más barato que comprar alimentos procesados y empacados individualmente.
Al planificar las comidas, se puede reducir el desperdicio de alimentos y evitar comprar alimentos innecesarios, lo que puede ayudarle a ahorrar dinero en el presupuesto de alimentos.
Agua: Salud y ahorro
Beber suficiente agua y mantenerse hidratado puede ayudar a prevenir enfermedades y afecciones relacionadas con la deshidratación, como las infecciones del tracto urinario y la deshidratación en sí misma.
Al usted elegir beber agua en lugar de bebidas azucaradas, se puede ahorrar dinero, y mejorar la salud física al mismo tiempo.
Muchas bebidas azucaradas pueden ser costosas, especialmente si se consumen con frecuencia y a veces se constituyen en un componente importante de los llamados gastos hormiga, es decir constituyen un gasto importante de dinero a lo largo del tiempo, sin considerar que nada bueno le aportan a la salud. Considere también que el azúcar es un alimento para las bacterias que se encuentran en la boca, lo que puede provocar la aparición de caries dentales, con los consiguientes gastos odontológicos y todo lo que esto provoca a nivel de salud.

Reflexión
Si tenemos una buena alimentación podremos tener una mejor salud y esto podría evitarnos gastos médicos importantes a futuro. Planificamos nuestras comidas y comprando solo lo que necesitamos, es menos probable que desperdiciemos alimentos y dinero.